24/3/12

Conocimiento

El conocimiento humano, la razón, se basan en simples resúmenes del mundo observable. Estos resúmenes dividen en fragmentos el mundo y buscan agrupaciones, de manera que existan propiedades comunes a todos los elementos de cada grupo. De esta manera, al enfrentarnos a un nuevo elemento, es tan simple como clasificarlo para predecir su comportamiento futuro.

Sin embargo, no debemos olvidar que, como resúmenes que son, no modelan el mundo, sino que son modelados por él. Creer, como creemos hoy, que es simple encontrar una ley universal, que todo elemento del mundo cumpla, es erróneo.

No hay razón para que el mundo se adecue a nuestro conocimiento, a nuestras leyes. Es perfectamente plausible, aunque no probable, la existencia de fragmentos del mundo que nunca cumplan nuestras leyes. Estos serán los límites de nuestro conocimiento. Podremos comprenderlos, pero no necesariamente unificarlos al resto de leyes o teorías.

18/3/12

Protocolo

Existen múltiples lenguajes distintos, y útiles en distintas situaciones. Me refiero al lenguaje matemático, al lenguaje de la física (como rama específica del matemático), al lenguaje natural... Personalmente, muchas veces me he obsesionado con encontrar un lenguaje natural universal y lógico (como el lojban, por ejemplo).

Sin embargo, creo que es imposible, en nuestra diversidad de ramas del conocimiento, tener un lenguaje válido para todo. La clave, creo, está en emplear protocolos adecuado, que introduzcan los lenguajes.

Esta situación es similar a lo que sucede en Internet. Existen protocolos que nos permiten introducir una conversación, y que nos marcan los pasos a dar para que esa conversación sea fructuosa (de cara a un objetivo concreto). De la misma manera, desarrollar un par de protocolos en lenguaje natural, orientados a describir un objetivo (quiero aprender de ti, sobre cierto tema que conoces), y que marquen los pasos para lograrlo (saludarse, poner en común los temas a tratar, exponerlos, plantear dudas, despedirse), nos permitiría, incluso con lenguajes no perfectos, lograr comunicaciones eficaces.

No olvidemos, al fin y al cabo, que el lenguaje es nuestra mayor herramienta para desarrollarnos como sociedad racional.

14/3/12

Cooperación

El ser humano, en un origen, empleo el ingenio y la inteligencia para, a pesar de su inferioridad física, imponerse en el mundo como raza dominante. Nuestro empleo de las herramientas a nuestra disposición nos hizo "mejores", y nos permitió sobrevivir.

Mi alerta es simple. Hoy, que ya no nos enfrentamos al peligro directamente, olvidamos que hay que seguir mejorando. Nos dedicamos ahora a mejorar físicamente, obsesionados por el aspecto y la fuerza. Cuando nunca fue nuestra herramienta, cuando nunca dependimos del cuerpo como arma principal.

Es simple ver que la única manera de seguir mejorando nuestra capacidad racional, al igual que en los ordenadores, es unirnos en red. Es cooperar y trabajar como un todo, como una verdadera sociedad. Tarde o temprano nos enfrentaremos a una catástrofe natural, y nuestra belleza no nos salvará. Ni nuestra inteligencia actual. Necesitamos unirnos, sin fronteras, con un objetivo simple:

Evolucionar. Racionalmente hablando.

11/3/12

Nudos

El conocimiento humano se teje como una red, sobre la que lanzamos hechos (lo que observamos y vivimos), con al esperanza de que queden atrapados, comprensibles a nuestra mente.

Esta red se compone de una estructura y de un material. La estructura (los nudos, la disposición) es la filosofía, y la ciencia es el material, las cuerdas de nuestra red.

Ninguna de las dos tiene sentido sin la otra. Una ciencia sin una filosofía, son cuerdas que se enredan. Es conocimiento puro sin una razón para ser empleado, sin una manera de articularse o de actuar. Una filosofía sin ciencia, por otro lado, son razones para actuar sin medios para lograrlo.

La filosofía, recordemos, es imprescindible. Es, además, finita. Hay un momento en el cual todo el avance queda del lado de la ciencia (tenemos ya un nudo "perfecto"), y la filosofía no tiene nada más que decir.

No significa esto que el conocimiento filosófico tenga un límite, sino que hay un cierto momento a partir del cual, la propia filosofía se vuelve ciencia. Solamente una pequeña base sin evidencias es necesaria entonces: la que nos invite a investigar, y a buscar el conocimiento. Es posible lograr una estructura casi perfecta, y solo queda ampliar nuestras redes, y pescar el universo.

Necesitamos herramientas avanzadas, y razones para utilizarlas.

9/3/12

Preguntas

El ser humano se hace muchas preguntas a las que no encuentra respuesta: ¿Por qué vivir? ¿Por qué existimos? ¿Quién nos creó? ¿Que hay después de la muerte?

Sin embargo, olvidamos que están planteadas en nuestro lenguaje, en nuestro idioma. El mundo existe, y no existen en la naturaleza ni preguntas ni respuestas. No tienen por qué tener respuesta, porque la naturaleza no la creó nuestro conocimiento: fue al revés.

Un porqué no existe fuera de nuestro lenguaje, y fuimos nosotros los que inventamos el concepto de "razón" o "causa". La naturaleza no tiene por qué amoldarse a estos términos, no tiene por qué existir una causa.

Un quién no tiene por qué existir, puede ser un qué, o puede no ser nada. Una creación, no ha sido jamás presenciada por nosotros, ni tan siquiera podemos asegurar que tal concepto sea posible (tal y como lo comprendemos, como paso de la nada al algo).

Incluso "después" es nuestra manera de manejar el tiempo, no necesariamente la única posible. Después de la muerte, tal vez no haya "después", ni haya tiempo si quiera.


Pienso, luego existo. Pero incluso el pensar es sólo vocabulario.


Recordad que nuestro lenguaje y nuestra razón sirven para resumir el mundo y comprenderlo, no para definirlo.  Sólo conociendo sus límites, podremos aprovechar su ilimitado potencial.

5/3/12

(R)Evolución

Muchas veces se maneja la posibilidad de vida alienígena con la creencia de que seguirán nuestras mismas leyes físicas y nuestra misma cultura. Sin embargo, la única ley lo suficientemente general y lógica como para tener posibilidades de ser universal, es la ley de la selección natural.

Como especie, hemos basado nuestro poder en nuestra inteligencia. Es nuestra arma principal contra el mundo. Sin embargo, a la larga la estamos empleando para construir jerarquías dentro de nuestra raza, definir una serie de objetivos (que poco tienen que ver con el progreso y la supervivencia) y lograrlos, despreocupándonos de la lucha por el legado y el futuro.

El problema es simple. Cualquier organismo que no se base en la individualidad, que no se componga de elementos egoístas (sea por tanto un único organismo grande o una comunidad de organismos capaces de colaborar, opciones ambas equivalentes), será claramente superior a nosotros.

En mi opinión, hemos cometido el error de creer que nuestra lucha ha terminado. El espacio, sin embargo, mantiene sus amenazas intactas, desde otras especies hasta desastres naturales a escala de sistemas solares. Si queremos dejar un verdadero legado, debemos (r)evolucionar. Revolucionar nuestra cultura, evolucionar nuestra sociedad.