14/1/13

5-Piensa antes de actuar

El mundo actual, por mucho que los deportistas quieran decir, no es ya un mundo de acción. No es un mundo donde un segundo de reacción signifique, comúnmente, la barrera entre la vida y la muerte. No es un mundo de película donde los héroes digan "No pensé, sólo actué".

El nuestro, estimado lector, es un mundo cada día más complejo, donde el hombre tiene cada día más poder. Donde cada acción conlleva infinitas consecuencias, muchas de ellas casi impredecibles.

En un mundo como el nuestro, no podemos vivir actuando al límite. En una película de noventa minutos, quizás, pero no en una realidad que tendrán que heredar nuestros hijos y nietos, las futuras generaciones.

Se impone la razón, el pensamiento, la consciencia del propio poder. El intelecto sobre la fuerza bruta, el análisis minucioso sobre la intuición, la cautela sobre la precipitación.

Se impone el pensar antes de actuar.

Un verdadero hombre racional, un hombre del mañana debe siempre saber asignarle al instinto su lugar: cerca de la excepción, de la necesidad, y nunca como la norma general.

Los diez Mandamientos Racionales

4 comentarios:

  1. La paciencia es la incapacidad de resolver. La impaciencia la precipitación al hacerlo. Seamos equilibrados.

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  2. Desde luego, no se puede caer en la pasividad absoluta, en la inacción. Pero actualmente, el problema tiende a ser siempre más el actuar sin pensar (y actuar mal, por tanto), que el no actuar. La gente se mueve mucho, sólo que casi nunca por aquello que importa.

    Sea como sea, lo importante siempre es compaginar las dos actitudes. Cada cual en su sitio, eso sí.

    Saludos

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  3. La verdad que desde el punto de vista de que el hombre es un ser racional, está argumentado, con lógica.

    ¿Pero quién dice que nuestra característica sea ser racionales?
    Es una de nuestras características claro que sí, pero no es lo que nos define. Pero bueno, a fin de cuentas nos hacen creer eso. Qué le vamos a hacer.

    No digo que ser racional no sea necesario, claro que lo es. Reflexionar, abstraerse, ver las cosas de otros puntos de vista, aprender....
    ¿Pero qué motiva las acciones? ¿Las motiva la razón?
    Yo no lo creo.
    ¿Qué nos hace más felices ( o sentir mejor)? ¿Nos lo hace la razón?
    Yo me permito dudarlo.

    Sencillamente creo que las pasiones y las intuiciones son mucho más importantes. Quizá nos nos hagan sentir tan "especiales" porque no sólo son nuestras. Pero nos hacen sentir que algo vale la pena.

    Quizás yo haya cometido muchos errores, y muchos aciertos, pero siempre, siempre lo mejor ha sido dejar guiarme por el corazón.

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  4. @Anonimo:

    Lo primero de todo gracias por pasarte por el blog, tomarte el tiempo de leer y además de comentar. Siempre es un placer oír la opinión de más gente.

    Sobre lo que comentas, no puedo garantizar tener la razón absoluta. Sin embargo, creo que actualmente hay demasiada gente amparándose en el sentimiento, en el corazón para llevar a cabo acciones que nos perjudican a todos.
    Piensa por ejemplo en las guerras religiosas, en el sentimiento de patriotismo o en la repulsión "natural" que algunos siente hacia las personas diferentes.

    En mi opinión, la "razón" es superior por un argumento muy simple: se puede estar equivocado o acertar, pero casi siempre se puede comprobar el resultado. Si alguien se ampara en la razón para justificar una mala acción, o bien tiene razón (en cuyo caso la acción será al menos relativamente buena) o bien estará equivocado (en cuyo caso, casi siempre, podrá demostrarse el error). Si se ampara en la fe o en el sentimiento, poco se puede discutir. De alguna manera, a la hora de convivir, el actuar sobre la razón nos permite alcanzar puntos comunes (no hay más que ver el avance de la ciencia). El actuar en base al corazón nos suele llevar, normalmente, a malos lugares (no hay más que ver para qué solemos usar la ciencia).

    La cosa, tal vez, sea distinguir los ámbitos. Nunca defenderé el dominio de la razón en las artes. Pero hoy en día dependemos más de la ciencia que del arte, más de la razón que del corazón. En mi opinión, al menos.

    Saludos, y gracias de nuevo por comentar.

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